martes, 24 de enero de 2012

¿Felicidad? No sé lo que es eso ahora...

Ahora mismo, todo lo que me rodea son problemas, problemas y más problemas. Pero todos tienen un origen. Un problema que se ramifica en muchos, y lo llevo arrastrando desde los 13 años.
Hace unos meses parecía que todo se estaba arreglando, que poco a poco el problema se iba disipando. Sin embargo, crece a tal rapidez que espero no tener que volver a esa vida miserable que tenía.
Debo sentirme muy afortunada por lo que tengo ahora, por dónde estoy, y pensar en que todo podría ir peor, pero no puedo por que me mata por dentro. Tengo que ser optimista si, es algo que me caracteriza, pero en este caso, ¿de qué sirve serlo? No tengo nada ahora por lo que merezca ser optimista y pensar en positivo, todo lo que me rodea, como ya he dicho, es mierda. No sé cómo pasaré estos días, solo espero que vayan un poco mejor, sin que la gente me hable de ese problema en concreto por que estoy al borde del colapso. No quiero oír hablar de él. Es muy difícil pasar el tiempo sin pensar en ello, pero es mejor que no me lo recuerden, estoy harta de que me lo recuerden, sé que nadie tiene la culpa de lo que me pasa, pero la gente que lo sabe no hace más que sacar el tema y me duele en el alma, no por mi, por que en el fondo me da igual, he sufrido tantísimo que llega el punto en el que todo me da igual, lo digo por mis padres, ellos están dando todo por mi, y me siento la persona más miserable por quitarles algo que tanto necesitan solo para que yo "sea feliz"...
No quiero pensar en ello, y parece que tengo un luminoso que me apunta con un cartelito que dice "hablar del tema"... Estoy harta, por favor solo pido que se arregle un poco, no digo del todo, solo una pizca...

Toda la vida...

Pensé que fue el error de mi vida. Que no soportaría verte. Que estar tan cerca de ti me iba a destrozar la vida. Que viviendo a tres metros de ti las 24h del día me mataría. 
Pensé que nada ni nadie me ayudaría a salir de aquello, pero creo que solo fuiste tú la que me ayudó. No hay nada peor que dejar de ver a la persona que amas. Aunque sea difícil ver a esa persona y que ya no te ame, que no quiera nada contigo, que te haya reemplazado por otra, es la mejor opción... Lo pasas realmente mal, pero no dejas de verla, sabes de su vida, y a la larga lo agradeces... 
Por mucho que me queje, que me jodan ciertas cosas de ti, eres y serás la persona más especial que he conocido. Has sido esa personita que he amado a rabiar, he hecho por ti cosas que nunca creí hacer, y ahora te has convertido en mi hermana pequeña. 
Creo que la promesa que hicimos de que envejeceríamos juntas se va a cumplir, me veo con 80 años con mis hijos y mi esposa y tú en la habitación de al lado con tus hijos y tu esposa =P
Han sido tantas las emociones que hemos vivido, que estamos viviendo y que viviremos, que el día que nos separemos se me va a caer el mundo encima. Espero que nunca ocurra eso, que las dos estemos al pie del cañón siempre, juntas, como hermanas, como una familia...
¿Recuerdas cuando nos conocimos? Fue en las clases de por la tarde, era un día soleado y estábamos hartas de los lunes, ya que eran infernales, desde las 9 de la mañana hasta las 8 de la tarde, pero a mi no me importaba por que estabas tú.
Ahora me alegro de haberte conocido, y me reitero: eres una persona muy importante para mi, siempre lo serás, por que marcaste mucho en mi vida. Han sido tres años muy intensos, han sido los más especiales de mi vida y no me arrepiento de nada, porque ahora significas mucho para mi, y recibo lo mismo; sé que me quieres y que sientes lo mismo que siento ahora por ti, me lo repites cada día, y me hace ser muy feliz. 
Sé que me amaste con locura, pero, al igual que todo tiene un principio, todo tiene un final, aunque yo no lo considero un final, por que lo mejor acaba de empezar. 
Pese a todo lo que nos ha pasado y aunque la gente piense que soy imbécil y retrasada por aguantar todo lo que he aguantado, te quiero, nadie me hará cambiar de opinión, por que eres mi pequeña, porque eres tú.
Te quiero a lo grande, pequeña.

lunes, 23 de enero de 2012

Solo tú

Cada vez que te miro... cada vez que paso por tu lado... cada vez que no me diriges la palabra... cada vez que mi cuerpo vuela cuando tu aroma pasa por mi mente... cada vez que escucho tu voz... cada vez que miro tu boca... cada vez que recuerdo que te tuve, que te besé, que me besaste, que me abrazaste con tanta fuerza  que llegué a creer que estaba en el paraíso... me mata la rabia de pensar que te tuve entre mis brazos y ya no.
¿Palabra idónea para ti? Quizás sea paraíso, esa sensación que me recorría todo el cuerpo de felicidad, de bienestar. No puedo creer que me hayas olvidado, que no recuerdes mis besos, mis caricias, mis susurros. Todo fue tan rápido, tan breve...
Ha pasado un mes desde la última vez que rocé tus labios, y aún recuerdo ese tacto tan maravilloso; no he logrado olvidar todo lo que sentí en tan poco tiempo, todo lo que me hiciste sentir. Ahora no hago otra cosa que recordarte; solo sé pensar en ti, en tu pelo, en tu carita, en tus manos, en tu cuerpo, en tu olor, en tus ojazos, en tu sonrisa...
Me despierto y lo primero que pienso es en ti. Me viene ese paraíso con el que estuve tan a gusto. Me quedo un rato en la cama pensando en lo que podríamos haber tenido y no llegó a nada; quizá fue por mi culpa, quizá fue la rapidez, por las ansias de tenerte, pero tú me transmitías eso, me hiciste muy feliz.
Quisiste conocerme; yo tuve más paciencia de lo habitual, nunca he tenido tanta paciencia, pero a pesar de todo, de lo que me decían, yo te esperé. Y si ahora me dices ven, yo voy pues no te he olvidado; sé que tú si, que me has reemplazado a lo mejor, que ya no quieres que te bese, que te susurre al oído lo preciosa que eres, que te abrace... no quieres nada y a veces no lo entiendo, me dijiste que me necesitabas y que me querías y de la noche a la mañana no quieres seguir con ello...
Dices que quieres verme, adelante, por que yo lo estoy deseando... Solo tu voz me consolará este dolor, aunque sea peor, pero quiero que me abraces y me preguntes cómo me va, si solo me das eso, solo quiero eso.
Necesito verte, aunque seas invisible...

Felicidades.

Hoy es tu cumpleaños y tengo la sensación de que cuando coja el teléfono estarás tú al otro lado, diciéndome "nieta, se me está rizando el pelo". Recuerdo cuando me hacías esos bailes al estilo... no sé que estilo, ya sé de quién he heredado el ritmo. Recuerdo cuando entraba en tu casa y estabas tú preparándome la merienda para pasar otra tarde increíble junto a ti. Recuerdo cómo le hacías de rabiar a la abuela y le hacías burla, eres el mejor. Te echo tanto de menos, pero sé que estés donde estés estás cuidando de la abuela, de mi, de mi madre, de todos.
Eres la persona más fuerte que he conocido, siempre has estado ahí, al pie del cañón, con tu optimismo aunque todo fuese mal. Tú me ayudaste a pensar en positivo y a ser optimista, ahora es algo que me caracteriza y lo he heredado de la persona más increíble del mundo. Sé que estos años no hemos estado juntos, pero han sido las circunstancias, por que cada día que pasaba deseaba más verte, y si te digo la verdad, me arrepiento de no haber estado más a tu lado. Me gustaría haber pasado más tiempo contigo, haber aprovechado más tus tonterías, tus gracias que tanto me hacían feliz. Aún las recuerdo y no me creo que ya no estés.
El año pasado prometí que este estaría más tiempo contigo, dije, "bueno, ahora que me voy a Madrid a vivir, estaré más tiempo con él" pero en cuestión de meses todo se complicó, y ahora no estás a mi lado, estás más lejos todavía, pero he de decirte que fuiste muy fuerte, luchaste como nadie luchó, aguantaste muchísimo.
Me has sacado tantas sonrisas, has hecho florecer en mi sentimientos que nunca creí sentir, ese optimismo que me invade es gracias a ti, lo vi, y me gustó, nunca he sido tan feliz hasta que no descubrí que ese optimismo fue creado por ti. Me dabas muchos ánimos cuando todo iba mal, me hacías ver que la vida no era únicamente lo que no teníamos en aquella época. Me enseñaste que ante los momentos difíciles lo mejor que se puede hacer es sacar una sonrisa a alguien, así haces feliz y te hacen feliz.
Me gustaría retroceder unos añitos para volver a verte, volver a ver esos bailes, esos cantes, volver a ver las rabietas de la abuela por tu culpa, volver a merendar contigo, volver a jugar al cinquillo cuando no teníamos nada que hacer, volver a bajar al garaje y verte trabajar la madera, esas cosas que hacías con tus manos eran tan increíbles, eran parte de ti, eran pedazos de tu fortaleza.
Sé que estés donde estés, ves como estoy logrando mi sueño, y me transmites tu fuerza para seguir adelante, pero no quiero que me la transmitas a mi, por que yo ya soy fuerte, transmíteselas  a la abuela, ella las necesita más que yo, cuida de ella desde allí. Te echamos muchísimo de menos.
Te quiero y te querré siempre